Currículum y Tecnólogo en Informática: tensiones y desafíos

Resumen

Este artículo apunta a problematizar tensiones y desafíos de visiones curriculares diversas en el marco de la cogestión institucional de la carrera Tecnólogo en Informática, considerando su relación con el mercado de trabajo. Esta carrera surge a partir de un convenio suscrito entre la Universidad del Trabajo del Uruguay (UTU), la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) y la Universidad de la República (Udelar) como una opción de formación terciaria corta con rápida inserción laboral en un área que presenta una alta demanda de profesionales y acelerados procesos de cambio. Se caracteriza por ser una propuesta especializada de pregrado con foco en las necesidades del sector productivo, aspecto que ha incidido en su diseño curricular y que se articula con una formación profesional de alto nivel, delimitada por un currículum cerrado y de enmarcamiento fuerte proveniente de la Facultad de Ingeniería de Udelar. Con el surgimiento de un nuevo actor educativo en la figura de la Universidad Tecnológica (UTEC), se firma un acuerdo de colaboración para que esta asuma la gestión académica de la carrera en el interior del país. Esto implicó el mantenimiento del plan de estudios y el ingreso a una lógica institucional que apuesta por la flexibilidad para formar futuros trabajadores en un contexto de evolución técnico-económica de la sociedad. Además, la carrera se incorporó a una oferta educativa con propuestas específicas en el área de la computación desarrolladas con una concepción de currículum flexible y orientada a acompasar el dinamismo del mercado laboral. En este marco, para el Tecnólogo en Informática emergen las tensiones en torno al currículum y su articulación con las futuras demandas de ese mercado laboral.